Un factor clave para conseguir resultados positivos es la evaluación del punto de venta. Hacerlo con frecuencia, dependerá de las necesidades de tu negocio
Las auditorías para los puntos de venta dependen de distintos factores clave, para poder lograr que los objetivos planteados se cumplan con éxito; uno de ellos es la frecuencia con la que se realizan. A pesar de no existir un plazo definido estándar, se puede establecer uno dependiendo de las necesidades específicas de cada negocio.
Para conocer la frecuencia, primero debes identificar el o los propósitos, esto ayudará a llevarla a cabo de manera eficiente y con objetividad bajo la temporalidad correcta.
Un aspecto básico que debes tener en cuenta son los indicadores que se quieren obtener con la auditoría y el detalle de estos. Debes definirlos de manera clara, qué mide cada indicador y cómo representarlo. Esto ayuda a realizar procesos de estudio, a definir la frecuencia correcta de su medición y a evitar que alguno se tenga que repetir.
No todos los puntos de venta son iguales y algunos cuentan con distintos departamentos. Por esta razón debes evaluar la cantidad de áreas y sus procesos internos, ya que cada una puede tener objetivos e indicadores diferentes, aunque la temporalidad de medición siempre deberá ser la misma.
Aunque no existe una frecuencia definida y puede depender de cada tipo de negocio, lo más recomendable es que realices auditoría con periodicidad quincenal, ya que una medición constante te permite una evaluación más detallada a corto plazo y la posibilidad de implementar cambios de manera inmediata, además de prevenir errores permanentes en el punto de venta.
Contáctanos y un
especialista te atenderá a la brevedad.
Recibe mensualmente
nuestros artículos sobre gestión de la Experiencia del Cliente.
